En México, la industria avícola, que incluye la cría de pavos, es una parte importante de la economía y la producción alimentaria. Sin embargo, como en cualquier actividad pecuaria, los pavos están susceptibles a diversas enfermedades que pueden afectar su salud y rendimiento.
Es fundamental para los productores avícolas implementar medidas preventivas, como la bioseguridad, la vacunación y el monitoreo regular de la salud de las aves, para minimizar el riesgo de enfermedades y mantener la salud de los pavos en las granjas avícolas de México.
La consulta regular con veterinarios especializados en aves de corral es esencial para el manejo adecuado de la salud aviar.
A continuación, detallaremos algunas de las principales enfermedades que afectan a los pavos en México.
Coriza infecciosa
Esta enfermedad es causada por la bacteria Haemophilus paragallinarum. Se caracteriza por la inflamación de la membrana mucosa del tracto respiratorio superior, lo que puede llevar a síntomas como estornudos, tos, secreción nasal y conjuntivitis. La coriza infecciosa puede afectar tanto a pavos jóvenes como a adultos.
Mycoplasma Gallisepticum
Esta infección micoplasmática afecta a las aves de corral, incluidos los pavos. Los síntomas incluyen secreción nasal y ocular, estornudos y tos. MG puede causar problemas respiratorios y afectar la producción de carne y huevos.
Coccidiosis
Esta enfermedad parasitaria es causada por protozoos del género Eimeria. Los pavos pueden contraer coccidiosis al ingerir ooquistes presentes en el suelo o en el ambiente. Los síntomas incluyen diarrea, pérdida de peso, falta de apetito y plumaje erizado. La prevención y control de la coccidiosis son esenciales en la producción avícola.
Newcastle (Viruela Aviar)
Aunque es más común en aves de corral como pollos, la enfermedad de Newcastle también puede afectar a los pavos. Se transmite por contacto directo con aves infectadas y puede causar síntomas respiratorios, nerviosos y digestivos. La viruela aviar puede tener un impacto significativo en la industria avícola.
Enfermedad de Gumboro
Causada por el virus de la enfermedad de Gumboro, esta enfermedad afecta el sistema inmunológico de los pavos. Los síntomas incluyen depresión, falta de apetito, diarrea y pérdida de peso. La IBD puede tener un impacto negativo en el rendimiento de crecimiento y la eficacia del sistema inmunológico.
Aspergilosis
Esta infección fúngica, causada por el hongo Aspergillus, puede afectar a pavos jóvenes. Se transmite por esporas presentes en el ambiente, especialmente en camas de paja o virutas de madera. Los pavos afectados pueden mostrar dificultad para respirar, tos y letargo.
Influenza aviar
Aunque más conocida por afectar a las aves de corral en general, incluyendo pollos, la influenza aviar también puede afectar a los pavos. La cepa altamente patógena del virus puede causar síntomas severos, alta mortalidad y restricciones comerciales significativas.
La prevención de enfermedades en criaderos de pavos es esencial para mantener la salud del rebaño y garantizar un rendimiento productivo óptimo.
Al integrar estas prácticas en la gestión diaria del criadero, los productores de pavos pueden reducir significativamente el riesgo de enfermedades severas y mantener un rebaño sano y productivo. La colaboración con veterinarios especializados en avicultura también es esencial para diseñar e implementar estrategias específicas basadas en las necesidades del criadero y las condiciones locales.
Aquí mencionaremos algunas medidas y prácticas clave que los productores de pavos pueden implementar para prevenir la ocurrencia de enfermedades severas en sus criaderos:
Bioseguridad
Establecer un plan de bioseguridad sólido es fundamental. Esto incluye limitar el acceso de personas no autorizadas al criadero, desinfectar el calzado y la ropa del personal, y tener protocolos claros para evitar la introducción de agentes patógenos al establecimiento.
Cuarentena y aislamiento
Al adquirir nuevos pavos o aves reproductoras, es crucial implementar un período de cuarentena para observar cualquier signo de enfermedad antes de incorporarlos al rebaño principal. Además, si se detecta una enfermedad en un lote, aislar a los pavos afectados ayuda a prevenir la propagación a otros grupos.
Programas de vacunación
Desarrollar y seguir un programa de vacunación adecuado es esencial para proteger a los pavos contra enfermedades específicas. Las vacunas deben administrarse de acuerdo con las recomendaciones de un veterinario especializado en avicultura y teniendo en cuenta las condiciones específicas del criadero.
Higiene y desinfección
Mantener instalaciones limpias y desinfectadas es fundamental. Esto incluye la limpieza regular de las instalaciones, equipos y utensilios. También es importante eliminar adecuadamente los residuos orgánicos y mantener un entorno seco.