Una de las fases más delicadas de atender en granjas y criaderos tiene que ver con la etapa de postparto. Durante esa fase pueden acontecer dificultades como la inmunodepresión. Esta última es propiciada por un equilibrio energético de tipo negativo. Conviene conocer en qué consiste la inmunodepresión en las vacas y cuáles son sus consecuencias.
La inmunodepresión en las vacas lecheras se presenta como una etapa en la que los ejemplares corren un mayor peligro de padecer determinadas enfermedades. Lo anterior se debe a que las vacas, cuando paren, lo hacen con un nivel de gordura que va disminuyendo conforme inicia su producción láctea.
Causas que propician la inmunodepresión en las vacas lecheras
Lo mencionado sucede porque el animal no logra alimentarse lo suficiente para solventar los nutrientes que está utilizando en la producción láctea. Tal condición puede alterar negativamente la capacidad reproductiva de la vaca y también dañar el potencial comercial de ese ejemplar.
Los expertos consideran que la inmunodepresión en las vacas lecheras se relaciona directamente con una complicación física. Básicamente sucede cuando el consumo en materia seca no basta para compensar el gasto de nutrientes que se presenta por el consumo lácteo de la cría y de la misma madre.
Inmunodepresión en las vacas lecheras y periodo de postparto
Es en el periodo de postparto cuando la vaca lechera experimenta una de las fases más complicadas de su vida en lo que se refiere a la conservación de su salud. Es una fase de transición que va de dos a tres semanas antes del parto y tres semanas posteriores al nacimiento del ternero o becerro.
Los responsables de emprendimientos pecuarios y los veterinarios que los asesoran deben tener presente que se trata de un periodo clave. Y es que si la vaca no se encuentra en las mejores condiciones para el periodo de preparto hay muchas probabilidades de que el rendimiento en la lactancia de ese ejemplar no será el mejor posible.
La razón principal de ello es que el organismo de la vaca no tiene de donde obtener los elementos nutricionales necesarios.
Medidas para solventar la inmunodepresión en las vacas lecheras
Los responsables de esa granja o criadero deben tener como objetivo un balance corporal en la vaca, ya que no se debe dejar que tenga una cría en extrema delgadez o con sobrepeso.
Durante la etapa de postparto la vaca se encuentra con sus defensas naturales debilitadas. Es allí donde se presenta la inmunodepresión, esto es, cuando carece de los nutrientes indispensables para su protección inmunológica, por haber tenido que ofrecérselas a la cría a través del calostro.
Debido a lo anterior, el organismo de la vaca tiene una mejor habilidad para solucionar las infecciones que le llegaran a afectar.
Importancia de atender la inmunodepresión en las vacas lecheras
Conviene puntualizar que ese periodo debe ser atendido con especial cuidado, puesto que, de su pronta solución depende el rendimiento lácteo que se obtenga de esa hembra.
Los responsables de atender a las vacas lecheras en las granjas o criaderos deben mantenerse al pendiente de las vacas, para garantizarles un equilibrio nutricional, de modo que no terminen por afectar la producción comercial de esa explotación.
Las vacas que sufren de inmunodepresión y que padecen algún cuadro infeccioso, por ejemplo, retención placentaria, metritis o mastitis, tienen la tendencia de rumiar o de moverse menos. Es algo que acentúa el balance energético de tipo negativo.
Infecciones variadas e inmunodepresión bovina
El incremento de las concentraciones plasmáticas de cetonas en las vacas con un balance energético como el antes mencionado, disminuye la actividad y la migración de los glóbulos blancos. Eso incrementa la vulnerabilidad del ejemplar a distintas infecciones que pudiera contraer.
Casi todas las vacas se ponen en un riesgo mayor de enfermarse por distintas infecciones durante el periodo de postparto debido a la inmunodepresión. Ello se relaciona con la menor actividad que se presenta con relación a los neutrófilos en el periparto.
También hay que mencionar que las enfermedades vinculadas con las funciones inmunitarias alteran los normales niveles reproductivos y productivos en las vacas lecheras. Manejar las enfermedades que se presentan durante el llamado periodo de transición implica un sacrificio de tiempo y esfuerzo además de obstaculizar las dinámicas habituales en las explotaciones pecuarias.