Hay quienes gustan de tener exóticas mascotas, como, por ejemplo, ciertas especies de rata. Por el hecho de que se trata de animales de gran dinamismo, inteligencia y con considerables deseos de jugar, la rata ha conseguido ganar popularidad como animal de compañía en numerosos hogares. Pero también hay muchas personas que aún consideran a las ratas como una auténtica plaga, animales de alto riesgo por las diferentes enfermedades que son capaces de transmitir.
Acerca del papel que desempeñan las ratas como vectores de severas enfermedades zoonóticas, en lo que sigue comentaremos algunos datos interesantes.
Potencial zoonótico de las ratas silvestres y las ratas mascota
Lo primero es dejar sentado que hay tipos diferentes de ratas domésticas y también de ratas que habitan en espacios silvestres. No todos estos animales actúan como portadores de microorganismos nocivos para la salud.
Contrariamente a lo que mucha gente cree, ratones y ratas no son animales sucios por su propia naturaleza, sino que, así como se presenta con muchos animales, estos obtienen tales gérmenes en el medio en donde habitan, en especial del agua y el alimento que ingieren.
Un animal como la rata, el cual habita en las calles, capaz de nutrirse de desperdicios y alimentos descompuestos, además de beber H2O polucionada y vivir en sitios nada salubres, con facilidad puede infectarse de numerosos patógenos de alto riesgo. Con ello, en poco tiempo se puede volver en un verdadero desafío para la salubridad pública.
Las enfermedades que las ratas pueden transmitir a los humanos
Cabe puntualizar que una rata mascota, animal que recibe las medicinas preventivas indispensables, con la adecuada higiene y alimentada con una dieta balanceada, no tiene porque convertirse en un portador de graves enfermedades, ni tampoco poner en peligro a las personas que cuidan de ese animal.
Principales enfermedades de potencial riesgo zoonótico asociadas a las ratas
Conviene conocer cuáles son las enfermedades más comunes que transmiten las ratas a los seres humanos, incluyendo sus principales síntomas, vías de contagio y los principales medios para combatirlas.
En este sentido, debemos mencionar enfermedades como el tifus, la fiebre por mordedura de rata, peste bubónica, salmonelosis, tularemia, hantavirus, toxoplasmosis y leptospirosis.
En las personas los síntomas vinculados a enfermedades como la Leptospirosis y enfermedad de Weil se manifiestan de manera leve, por ejemplo, con molestias como dolor de cabeza, fiebre, malestar corporal y conjuntivitis. No obstante, en los casos de mayor severidad- un porcentaje del diez por ciento de las personas diagnosticadas, las personas afectadas pueden sufrir de meningitis y de hemorragia pulmonar.
El problema del hantavirus y su riesgo zoonótico
Es tiempo de comentar acerca del hantavirus, otra enfermedad de gran riesgo zoonótico que suelen transmitir las ratas. Se trata de un problema de salud causado por un virus relacionado con la familia Bunyaviridae. Enfermedad de complicada detección, la vía de contagio más importante es la inhalación o el contacto directo de las heces, saliva y orina de ciertas variedades de ratones y de ratas.
Los síntomas producidos por el hantavirus son las complicaciones gastrointestinales, malestar general, abundantes escalofrío, intensos mareos, fuertes dolores en los músculos y acentuada fiebre.
La tularemia, otra enfermedad que transmiten las ratas
En este caso tenemos a una enfermedad de tipo infeccioso provocada pór la bacteria llamada Francisella tulariensis, la cual se presenta principalmente en ardillas, liebres, conejos y también en algunas ratas que habitan en hogares en calidad de mascotas.
Los síntomas causados por la tularemia son variados, como por ejemplo, escalofríos, irritación en los ojos, fiebre, manchas rojizas en la piel, una patente disminución de peso, complicaciones respiratorias, dolores en los músculos, dolores de cabeza y otros más.
En las personas, la tularemia se contagia a través del contacto con la sangre y los tejidos de ratas infectadas por el mencionado microorganismo. Si embargo, en ocasiones la tularemia también puede transmitirse a través de la mordedura de garrapatas, moscas y mosquitos, los cuales operan como vectores de ese germen.
La tularemia es un problema de salud que se se atiende empleando ciertos antibióticos capaces de eliminar a las bacterias y contener el desarrollo de los síntomas.
Cuando se presenta algún problema relacionado con la trasmisión de ciertas enfermedades por las ratas, es preciso consultar de inmediato con un especialista en el campo para que atienda de inmediato el caso y procure la mejor solución.