Para cuidar bien a los animales de granjas y criaderos es preciso conocer lo mejor que sea posible los factores que ponen en riesgo su bienestar corporal. De entre ellos destaca el asunto de los parásitos que afectan en mayor medida a las reses y otros animales de granja.
En lo que sigue comentaremos cuáles son algunos de los principales parásitos externos e internos que más daño causan a los bovinos. Se trata de un problema capaz de causar una gran afectación a los criadores de ganado, terneros y vacas lecheras. Por lo general las infestaciones de parásitos internos o externos reciben el nombre científico de parasitosis.
Endoparásitos y ectoparásitos de los animales de granja
Ahora bien, existen dos clases de parásitos: los que habitan en el interior del cuerpo del bovino y los que habitan en el exterior del animal. Por lo que se refiere a los llamados endoparásitos destacan los quistes hepáticos y las lombrices, mientras que los ectoparásitos están representados por las garrapatas, piojos y aradores.
Las garrapatas son una especie de ácaros que tienen presencia en áreas boscosas, zonas de altas hierbas, en las orillas de los senderos y en los propios espacios urbanos, especialmente en los terrenos sin fincar. Cuando llegan a su etapa adulta, las garrapatas buscan un animal hospedador para obtener alimento de su sangre.
El peligro de las garrapatas en bovinos
Aunado al daño que pueden causarles las garrapatas a los bovinos con la extracción de su sangre, estos parásitos tienen un rol determinante en la diseminación de enfermedades en una dinámica que se manifiesta de dos maneras: la primera multiplicando sus gérmenes en el interior del rumiante, y la segunda sirviendo a manera de jeringa inyectora de esos mismos gérmenes y las molestas reacciones cutáneas que causan sus picaduras y que afectan a los animales.
No menos riesgosas para la salud de las reses, vacas y terneros son las moscas, en especial las llamadas moscas picadoras o hematófagas. Se trata de insectos dípteros que tienen un tamaño mayor de 3 milímetros y que son capaces de sustraer sangre de otros animales. Para ello cuentan con piezas bucales adecuadas para perforar la piel de los animales a los cuales les sustraen sus fluidos biológicos.
Daño en rumiantes causado por el tábano
Otro insecto que causa este mismo problema en el ganado es el tábano. Es otro díptero que pica a otros animales para extraerles su sangre. Tal acción es muy dolorosa para estos últimos. Se calcula que existen más de 300 especies de tábano en nuestro continente y están considerados como un importante factor en la difusión de enfermedades como la Tripanosomosis bovina.
Otro importante ectoparásito es el gusano barrenador, el cual puede causar la muerte de reses y vacas si no es eliminado con la asesoría de un veterinario experto.
Principales endoparásitos de reses y cerdos
Es tiempo de comentar acerca de los más riesgosos endoparásitos del ganado. En este caso destacan los Trematodos, gusanos planos parásitos que tienen una curiosa forma de hoja y que se concentran en los conductos biliares de los animales a los cuales afectan. En su periodo de máximo desarrollo, este parásito llega a medir unos cinco centímetros de longitud y un centímetro de ancho, por lo cual puede ser identificado fácilmente para poder ser extraído del bovino.
Por otra parte, una grave afección hepática en bovinos es causada por los parásitos pertenecientes al género Fasciola. Lo peor es que este problema parasitario también puede hacerse presente en otros animales y en los seres humanos.
Sin embargo, son los bovinos los más afectados por esta clase de endoparásitos, en especial en lo que se refiere al trematode, también conocido como “verme chato”. Este agente parasitario se concentra en los canalículos biliares del animal al que afecta. Estamos ante uno de los problemas de productividad y aprovechamiento bovino más frecuentes en granjas y graneros.
Otras graves enfermedades de origen parasitario en animales de granja
Ahora mencionaremos a otro de los endoparásitos más peligrosos para los rumiantes: los gusanos segmentados. Estos cestodos son los causantes de la hidatiosis, una enfermedad muy dañina en los animales de granja. La hidatiosis es causada tanto por la tenia saginata como por la tenia solium, las cuales son productoras de los cisticercos.
La tenia se localiza en la carne de bovinos y también en la carne de cerdos que han sido infectados por la tenia. Cuando esta carne contaminada es consumida por las personas, pueden sufrir graves complicaciones intestinales.