Los mininos mascota cuentan con un notable instinto de cacería, el cual, aunque sea menos intenso, por contar con menos alimento en casa sin esforzarse, que el de sus ancestros, los mininos del desierto, los cuales conseguían sobrevivir únicamente de las presas que conseguían cazar.
De todos modos, ciertos mininos de interior continúan cazando insectos, mamíferos de pequeño tamaño e incluso mamíferos de pequeño tamaño que ingresen a los hogares, como por ejemplo, ciertos mamíferos que ingresen a los hogares.
De inicio, ello parece bastante positivo, al coadyuvar en la eliminación de plagas sin la necesidad de contratar a un especialista.
Por otro lado, si un gato se alimenta de una rata se corre el riesgo de que se transmitan enfermedades zoonóticas, esto es, con el potencial para causar afectaciones a las personas. Por ello es indispensable que las ratas y los mininos no interactúen de manera directa.- En las líneas que siguen les comanteremos cuáles son algunas de las enfermedades de las enfermedades que las ratas y los mininos se pongan en contacto.
Toxoplasmosis
Las ratas pueden presentar quistes de Toxoplasma gondii, un parásito perteneciente al conjunto de los coccisios que vincula al gato y a felinos diferentes como una suerte de hospedadores permanentes, esto es, en los cuales se completa el ciclo, aunque también es capaz de causar afectaciones en la salud del animal, incluyendo a otros animales que tienen sangre caliente. Lo anterior incluye también a los seres humanos.
Tularemia
Roedores como es el caso de la rata puede operar a manera de reservorio de microorganismos como francissella tularensis, la cual infecta a los mininos y les provoca sínomas clínicos como, por ejemplo: úlceras en el paladar y la lengua, dolores musculares, incremento en las dimensiones del bazo, crecimiento en las dimensiones del hígado, secreciones nasales y oculares, anorexia, deshidratación y fiebre.
Por otra parte, los mininos pueden provocar contagios entre las personas que los atienden. En los humanos pueden aparecer distintas clases de tularemia, como es el caso de la septicémica, neumónica, orofaríngea, ulceroglandular y glandular.
Leptospirosis
Por otra parte, las ratas son capaces de portar bacterias como la productora de la leptospirosis. Y mientras que los mininos exhiben una versión menos grave o moderada de este mal, lo humanos son bastante más sensibles a ella.
Algunos de los síntomas más frecuentes asociados a este mal son escalofríos, dolores de cabeza, vómitos, fiebre, ictericia, anemia y variadas erupciones. En los casos más severos dela enfermedad el animal puede requerir la hospitalización.
Como vía de hospitalización más importante de todos estos microganismos hay que mencionar a la orina de las ratas y la ingesta de ratas y roedoes por parte de los mininos.
Síntomas asociados a la leptospirosis son el aliento desagradable, vómitos, deshidratación, diarrea, poliduria y fiebre.
Hantavirus
Roedores como las ratas son frecuentes portadores de hantavirus, microorganismo que es capaz de desencadenar severas secuelas en los seres humanos, aunque no en los mininos, los cuales fungen como portadores de tipo asintomático.
Los contagios de hantavirus se presentan por medio de polvo polucionado con los excrementos de los roedores o por medio de las heces, orina y saliva de estos mismos animales.
Por otra parte, el hantavirus en los seres humanos es causante de dos modos clínicos: la fiebre hemorrágica capaz de desencadenar síndrome renal y también el síndrome púlmonar, el cual es un mal de gran severidad.
Peste
Así también en las ratas es posible hallar microorganismos como la bacteria Yersinia pestis, la cual es causante de la peste. Los mininos se contagian de esta enfermedad cuando consumen ratas polucionadas por el germen, en tanto que los humanos se contaminan luego de ser picados por pulgas presentes en roedores infectados.
Los mininos infectados desarrollan síntomas como los que a continuación mencionaremos: tos, depresión, anorexia, dolores musculares, fiebre, diarrea, vómitos, inflamación en los módulos linfáticos y lesiones en la boca.
Intoxicación relacionada con raticidas
Es habitual emplear raticidas para contener infestaciones de roedores, principalmente en donde el peligro de plagas es mayor o para la protección de las cosechas, si bien, no es raro que puedan usarse productos raticidas en las grandes ciudades.
El problema de productos como los mencionados es que no solamente acaban con las ratas, sino que también implican un enorme riesgo para los mininos si se ponen en contacto con los roedores envenenados.