Hay diferentes complicaciones de salud que puede experimentar un can de la raza yorkshire terrier. Tal y como sucede con muchos de los llamados perros de raza, el yorkshire expone una determinada predisposición a experimentar determinados problemas genéticos. Ya sea que se cuente con un perro yorkshire de edad avanzada, o bien, si se atiende en casa a un cachorro de esta raza, lo que comentaremos en esta nota te resultará provechoso para que logres conocer cuáles son las enfermedades de tipo congénito que afectan a los yorkshire terrier.
Conocer los síntomas asociados a esta complicación es indispensable para detectarla a tiempo y así combatir sus consecuencias con todos los recursos veterinarios posibles.
Lo anterior es indispensable para impedir que algunas de las patologías que mencionaremos a continuación logren reproducirse, para así impedir que los cachorros también las padezcan.
Problemas de salud canina que afectan al can yorkshire
La displasia de retina es una complicación anormal de la retina del can y por lo general provoca en el perro ceguera o cierta discapacidad visual. Hay tres modalidades de esta enfermedad capaz de dañar al perro yorkshire y lamentablemente no hay tratamiento para atenderla. Otra problemática ocular que suele presentarse en los perros yorkshire es el entropión, enfermedad de los ojos que provoca que los párpados del can se doblen hacia adentro.
Es tiempo de comentar acerca de la derivación portosistémica. Es una enfermedad que suele presentarse cuando el yorkshire es solo un cachorro y se perfila como un problema circulatorio en el hígado, ocasionando que la sangre llegue a la vena cava sin que se haya filtrado además de que genera una intoxicación del animal, lo cual también puede desencandenar en el can complicaciones neurológicas. El tratamiento que se emplea para atender los casos de derivación portosistémica precisa la realización de una cirugía.
Enfermedades que se presentan en los perros yorkshire terrier
El colapso traqueal implica un estrechamiento de la tráquea, evento que genera en el animal ataques de tos seca. Por lo general se presenta luego de haber realizado ejercicio físico o cuando el animal consume comida y agua. El colapso traqueal suele acontecer en canes “tacita de té y puede ser controlado el problema empleando medicina.
La luxación patelar es un cierto desplazamiento de la rótula, lo cual suele estar relacionado con una malformación física. Casi siempre puede volver a colocarse la rótula en el sitio correcto, aunque es el veterinario quien debe realizar esta maniobra. Con el paso del tiempo la luxación patelar es capaz de producir osteoartritis, por las alteraciones en las articulaciones. Todo lo anterior dependerá de la severidad del caso, puesto que según las circunstancias puede requerirse una cirugía.
Hidrocefalia, Queratoconjuntivitis seca e Hipotricosis congénita
Otras enfermedades relacionadas con los perros de raza yorkshire terrier son la Hipotricosis congénita, la Queratoconjuntivitis seca y la Hidrocefalia. La primera de estas enfermedades se perfila como una complicación en la piel del can. Causa la caída del pelaje del perro por la carencia de folículos capilares. También pueden experimentar daños las glándulas sudoríparas y los dientes del can.
La Queratoconjuntivitis seca consiste en una insuficiente producción de lágrimas lo cual genera sequedad en el globo ocular. Posteriormente pueden presentarse cicatrices, ceguera, úlceras e irritación. El problema en cuestión puede ser contenido procurando la necesaria humedad en el globo ocular.
Por lo que se refiere a la Hidrocefalia se trata de una patología que ocasiona acumulaciones de líquido cefalorraquídeo en diferentes áreas del cerebro. Lo anterior produce en el animal visión deficiente, intensos dolores, convulsiones y movimientos corporales incontrolados. Para controlar el problema, el veterinario puede emplear medicación aunque casi siempre suele ser preciso un drenado del líquido.
Enfermedades que también suelen presentarse en los perros de raza yorkshire terrier son la paulatina atrofia de la retina y cataratas. Lo primero se presenta como un progresivo deterioro de la retina y si bien es más frecuente de manifestarse en los perros de edad avanzada, también pueden identificarse casos en canes aún jóvenes.
En lo que se refiere a las cataratas se perfila como una enfermedad que genera la opacidad en la lente ocular del can, al grado de causarle discapacidad visual y hasta la pérdida total de la vista.