En ciertos casos podemos advertir que nuestro can traga saliva con demasiada frecuencia. Es un gesto que suele presentarse junto con sonidos extraños, babeo abundante y el abdomen con movimientos que parecen ser producto de nauseas.
Al final es factible que el animal termine por vomitar.
Tomando en cuenta lo anterior, no siempre será fácil asociar estos síntomas con alguna enfermedad en específico. Cuando un can da la apariencia de que traga saliva de modo anormal, ello puede estar relacionado con otros problemas que sí ameritan atenciones veterinarias necesariamente.
En lo que sigue comentaremos más acerca de por qué mi can parece tragar saliva con frecuencia.
La sinusitis y la rinitis como posibles causas
Hablar de la rinitis es hacerlo acerca de una infección nasal, misma que puede difundirse hacia los senos y en tal caso se le llama como sinusitis. Los indicios clínicos vinculados a ambas enfermedades son secreciones nasales espesas y con olor desagradable, estornudos y frecuentes nauseas a causa de goteo posnasal.
Este último es una secreción que se traslada de la nariz hacia la boca del animal. Eso es lo que provoca que el animal de la impresión de estar tragando saliva con demasiada frecuencia.
Son distintos los factores capaces de propiciar la sinusitis y la rinitis, como, por ejemplo, los hongos, bacterias y virus, especialmente en los perros de mayor edad. También pueden desencadenar el problema los tumores o las infecciones dentales.
Cuerpos extraños como posibles factores clave
Al hablar acerca de cuerpos extraños nos referimos a objetos como cuerdas, espigas, juguetes, pelotas, anzuelos, astillas y huesos. Cuando estos objetos quedan atorados en el esófago, la garganta o la boca del perro es posible observar que nuestro can da la impresión de estar tragando saliva con anormal frecuencia.
El animal también da ala apariencia de estarse ahogando, hipersalivar o relamerse los labios en repetidas ocasiones. De la misma manera suele frotarse el hocico contra otros objetos o con las patas, mostrarse muy inquieto y tragar con enorme dificultad.
Es indispensable ir con el veterinario, ya que cuanto más tiempo se quede ese cuerpo extraño en el cuerpo del perro, aumenta más el peligro de que se presente alguna infección u complicación. En los peores casos, el can puede terminar por ahogarse.
La faringitis como causante del problema
En este caso tenemos una inflamación de la garganta del can. Con frecuencia afecta a las amigdalas y también a la faringe. Es habitual que tales afecciones se encuentren vinculados a infecciones de las vías respiratorias o infecciones orales.
Cuando se presentan casos de faringitis nos percataremos que el animal da la apariencia de tratar saliva repetidamente además de padecer fiebre y tos. Los perros con esta enfermedad exhiben poco apetito y tienen la garganta inflamada, con abundantes secreciones. Por supuesto, un cuadro así amerita inmediatas atenciones veterinarias.
La esofagitis como factor propiciador del problema
La esofagitis refiere a una inflamación que se presenta en el esófago del can. Se trata de una condición que puede estar relacionada causas variadas. Los perros con este problema dan la apariencia de tragar saliva en abundancia, padecer dolores, hipersalivar e incluso regurgitar.
Cuando el problema se hace crónico el can deja de tener apetito y paulatinamente pierde demasiado peso. La esofagitis es un cuadro que requiere de una necesaria atención por parte del veterinario. Este especialista es quien determina la causa del problema y el tratamiento indispensable para su curación.
El caso de los vómitos también es revelador
En ciertas ocasiones, podemos advertir que nuestro can hace como que traga saliva a ritmo anormal, además de mostrarse agitado al extremo apenas antes de vomitar.
Son las arcadas o nauseas que derivan de las contracciones abdominales y también una relajación en la zona baja del esófago, factores que producen esa actitud en el perro que hemos estado comentando.
Tal situación es lo que facilita que el contenido estomacal sea expulsado por la boca como abundante vómito. No obstante no todos los eventos de nausea terminan de esa manera y pueden quedarse apenas en la fase de las arcadas.
Cabe mencionar que los perros suelen vomitar con facilidad, aunque no es raro que lo hagan por causas que no deben de causar demasiada preocupación. Ello suele acontecer cuando han ingerido basura, por estrés, cuando han comido hierba o cuando están nerviosos o mareados.