Más allá de los cuidados que se le den durante su vida a una mascota, ese perro tarde o temprano entrará en la vejez. Y es justamente en esa fase de su vida cuando más necesita muestro apoyo, nuestro cariño y cuidados. Tanto el propietario del perro, como el animal van envejeciendo juntos y cuando se presenta la muerte del can, su dueño experimenta vivencias de enorme dolor.
En este texto comentaremos cuáles son los mejores cuidados que se les deben dar a los perros ancianos.
La esperanza de vida de los perros mascota
Cabe destacar que la esperanza de vida del perro ha ido en aumento con el paso de los años, en especial por la utilización de medicamentos cada vez más eficaces. También la alimentación que se le ofrezca a un perro juega un rol determinante para prevenir diferentes enfermedades. No menos importante resulta, para que el perro se conserve en buenas condiciones físicas, que realice distintas actividades cotidianamente: que corra y juegue de preferencia al aire libre.
La natural disminución de las facultades físicas del can
Factores como el comportamiento del can y las variaciones que se presentan en el metabolismo del perro con el paso de los años, también deben ser tomados en cuenta para elegir la dieta que se le debe dar a esa mascota. Cuando se hace anciano el perro se vuelve menos activo, con un metabolismo más lento, de modo que su cuerpo se defiende con menor eficacia de las bajas temperaturas. El animal pierde masa muscular, tiene mayores dificultades para digerir el alimento por la reducción de enzimas que se presenta en su organismo.
La alimentación de los perros de edad avanzada
Debido a lo anterior se le deberán de dar alimentos adecuados para esta etapa de su vida. La comida cotidiana se le deberá de servir en dos tomas y si se le ofrecen al can alimentos de tipo casero es aconsejable que sea carne blanca, arroz o pasta perfectamente hervida y sin sal. Por el hecho de que los dueños de perros ancianos, por el gran apego que tienen a sus mascotas, suelen servirles demasiado alimento, lo mejor es consultar con el veterinario cuál es la ración que se le debe ofrecer al can.
La hidratación de los perros ancianos
No menos relevante es la hidratación que se le debe dar al animal. El cuerpo del can anciano cuenta con una proporción de agua más pequeña que la de un perro de menor edad. Además, el perro de edad avanzada también siente menor sed y ello trae asociados riesgos mayores de que el animal se deshidrate, principalmente cuando experimente eventos de diarrea o de vómitos.
Uno de los cuidados indispensables que se le deben ofrecer al perro anciano es la de recibir revisiones veterinarias con la debida frecuencia. En efecto, en cuanto llega a la edad de diez años, un perro debe ser sometido a distintos exámenes: palpación, electro, de sangre y radiografía. De nuevo hay que resaltar la importancia que tiene contar con el apoyo de un veterinario experto para la realización de estos exámenes médicos.
Importancia de los exámenes veterinarios para los perros ancianos
Las radiografías pulmonares ayudan a detectar en el perro anciano tumores que se forman en los pulmones, así como también problemas en los bronquios; los análisis de sangre ayudan a calcular el nivel de glóbulos rojos y de urea en el torrente sanguíneo del animal; para evaluar el estado del corazón canino lo mejor es efectuar un electrocardiograma, y la palpación del abdomen es un examen que nos permitirá cerciorarnos de que no existan sospechosos bultos en el cuerpo del perro.
El dolor de espalda en los perros de avanzada edad
Una de las dolencias que más afectan a los perros ancianos se presenta en la espalda. Los dolores de espalda pueden limitar mucho la movilidad del perro, por lo cual, de presentarse este problema corporal habrá que acudir de inmediato con el veterinario para que nos señale cuál es la terapia más conveniente que se debe seguir para sanar al perro.
Nuestra mascota agradecerá el interés que mostramos por su salud y bienestar. Nuestro perro disfrutará sentirse querido y cuidado. La verdad es que un animal de compañía es capaz de captar y sobre todo de sentir cuando ya no es aceptado por la familia por haber llegado a una edad avanzada.