La bronquitis infecciosa es una de las enfermedades más riesgosas para las aves de corral y uno de los principales desafíos para los criadores y granjeros. El causante de este mal es cierto coronavirus que afecta exclusivamente a gallinas y pollos.
De entre los principales síntomas asociados a la bronquitis infecciosa destacan los sonidos respiratorios, los cuales incluyen estertores y jadeos, los cuales derivan de mucosidades en la tráquea. También es habitual que se presente la tos, ojos lagrimeantes y secreciones nasales. Cabe mencionar que la enfermedad en cuestión se transmite a través del aire y otros medios de tipo mecánico.
Las enfermedades de las aves de corral
Esta enfermedad de las aves de corral habitualmente afecta a un lote entero de estos animales y no a ejemplares aislados. Cabe mencionar que no hay un tratamiento bien definido para atender esta enfermedad y en cuanto se presenta es difícil de mantener bajo control. No obstante, es posible obtener inmunidad con rapidez por medio de la vacuna creada para combatir esta enfermedad.
Otra de las enfermedades más dañinas para las aves de corral es la cólera aviar. Se trata de una enfermedad que también tiene un elevado potencial de contagio en pavos, pollos, gallinas y otras aves de corral. Por lo que se refiere a los síntomas principales de la cólera aviar es preciso mencionar los siguientes: pocas ganas de alimentarse o de tomar agua, una acentuada pérdida de peso, diarrea abundante de color verde- amarillo y un descenso notable en su capacidad para poner huevos.
Afectaciones en la salud de las aves de corral
Con frecuencia se presentan casos de parálisis en las extremidades inferiores de las aves de corral afectadas por la cólera aviar. La principal fuente de transmisión de esta enfermedad son las heces de las aves infectadas, en especial cuando son esparcidas en la cama, agua y alimento que consumen estos animales. Otro factor que propicia la difusión de la cólera aviar es que las gallinas y pollos sanos tienden a picotear los restos de las aves que han muerto por este problema de salud.
El tratamiento veterinario más utilizado para atender los casos de cólera aviar incluye la aplicación de sulfas, en especial de sulfaquinoxalina. También suele ser provechoso el uso de fosfomicina, medicamento eficaz para combatir los problemas respiratorios en las aves de corral. También es indispensable que el personal de la granja o del criadero retire pronto los cadáveres de los animales fallecidos a causa de esta enfermedad. De ese modo se eliminará el riesgo de canibalismo por las demás aves, lo cual incrementa el riesgo de que se produzca un gran brote de cólera aviar.
El problema de los parásitos externos en gallinas, pavos y pollos
Altamente dañinos resultan también los parásitos externos, mismos que afectan a las aves de corral en su plumaje y en su piel. En especial los piojos, pulgas, garrapatas, ácaros, mosquitos y chinches se perfilan como un auténtico problema para la salud de las aves de corral. Los piojos son parásitos bastante habituales en esta clase de animales. Se trata de ácaros de tonalidad parduzca que son visibles sin problemas al examinar el plumaje y la piel de los animales afectados. Los piojos más habituales son los que se ubican en las alas y cabeza de los pollos y gallinas.
El tratamiento más recomendable para atender a las aves de corral con problemas de piojos precisa que los animales sean atomizados con malatión, de preferencia en la noche y con escasa luz, es decir, cuando los animales se encuentran tranquilos y en pleno reposo. Es preferible ingresar al galpón muy despacio e iniciar la atomización sin apresuramientos para así no alarmar a las aves con los sonidos producidos por el aspersor.
Combatir las garrapatas en pavos y gallinas
Por lo que se refiere a las garrapatas se trata de un parásito vinculado con los ácaros. Y si bien no es habitual hallarlo en las aves de corral, se llega a presentar en las explotaciones ubicadas en ambientes secos y calurosos. Debido a la sangre que les chupan a las gallinas y pollos, los animales afectados pueden derivar en casos de anemia y disminuir la producción de huevos.
Aunado a lo anterior, las garrapatas son frecuentes portadoras de enfermedades de tipo infeccioso. El tratamiento para eliminar las chinches se realiza usando principalmente malatión atomizado.