Es indispensable identificar el modo en el que las necesidades de un can alteran su comportamiento. Esto resulta aún más importante en las primeras semanas de vida del cachorro. Resulta básico tratar de saber cómo piensa, qué siente el joven animal y hacer que esas necesidades concuerden con las expectativas que se tengan acerca de esa mascota.

Los meses iniciales en la vida del cachorro deben ser aprovechados para exponerle al can las diferentes facetas de la vida, lo bueno y lo malo. El adiestramiento orientado a la obediencia puede ser puesto entre paréntesis, ya que lo más importante en esta etapa de la vida del cachorro es lograr que se sienta a gusto y seguro con todo lo que le rodea.

Como se debe cuidar a un cachorro

En buena medida los cachorros son parecidos a los infantes en pleno desarrollo. Las necesidades del animal deben ser algo prioritario para su dueño, ya que este último es quien debe enseñarle a moderar sus impulsos y a desarrollar su capacidad comunicativa.

Por el momento, el afecto y el apego que el cachorro demuestre hacia su dueño será una derivación directa de la interacción que este último ha tenido con el joven can. De allí la importancia que tenga establecer una relación cariñosa con el cachorro desde sus primeras semanas de vida.

Por lo general se tiene una idea un poco idealizada acerca de la experiencia de tener un perro desde cachorro. Se considera que todo resulta muy sencillo, desde la llegada del perro a la casa, hasta que se vuelve amigo de los chicos, se hace el mejor guardián del hogar, se gana la confianza de la familia, entra en la senectud, etc.

Cómo se debe adiestrar a un cachorro

No obstante, lo cierto es que los jóvenes canes van madurando de manera gradual y el comportamiento que exhiban en la adultez dependerá enteramente de las interacciones que sus dueños han tenido con el animal y las vivencias cotidianas en el hogar.

De modo que el cuidado del cachorro precisa de mucha paciencia, tiempo, tolerancia y comprensión. Cuanto más se pueda conocer acerca de las necesidades de los cachorros y las pautas de aprendizaje que tienen estos animales, más considerables serán las posibilidades de que se tenga una mejor relación con nuestras mascotas.

Paciencia y cariño al cuidar a un cachorro

Todos los dueños de perros en algún momento han pasado momentos difíciles periodos en los cuales se llegan a sentir rebasados y abrumados por haber adoptado un cachorro, en especial si se tienen problemas en alguna fase del adiestramiento.

El error en este caso es tener expectativas demasiado elevadas con respecto al cachorro. Nunca deben sobrepasar las expectativas que se tengan acerca del perro a las capacidades particulares del animal.

La responsabilidad de adoptar a un perro

Una recomendación que debe tomarse en cuenta es organizar al máximo el horario de nuestras actividades cotidianas para reservar para el perro el tiempo suficiente, de calidad y necesario, para resolver las necesidades del cachorro y consolidar la relación que se tenga con esa mascota.

Hay quienes aconsejan adoptar un can que ya se encuentre en la edad adulta, o por lo menos un perro que ya haya superado la etapa de cachorro. Lo positivo de ello es que se trata de un animal que ya ha dejado atrás las complicaciones de ser cachorro, aunque, en contraparte, ya no se tendrá la mejor ocasión de moldear el modo de ser de la mascota a nuestro gusto y desde su misma llegada al hogar.

Las atenciones que se le deben ofrecer al cachorro

Las atenciones que se le ofrezcan al perro en su etapa de cachorro serán factores que estimularán en él los más variados compartimientos. De ese modo, es conveniente propiciar al máximo el buen comportamiento del cachorro usando para ello juguetes adecuados, los cuales propicien positivos hábitos de masticación en nuestra mascota.  

También es conveniente utilizar golosinas para hacer más eficiente el adiestramiento del cachorro. Usar juegos que lo mantengan activo y que estimulen la inteligencia del animal es cien por ciento recomendable. Cuidar a un cachorro precisa de cariño, entrega y mucha atención por parte de su propietario.

Día con día los cachorros precisan de alimento, agua, un buen periodo de sueño, jugar y hacer sus necesidades. Para identificar las necesidades que tienen los cachorros basta con atender los gimoteos del animal, ya que cuando precisan de algo suelen mostrarse inquietos e impacientes.