Sin lugar a dudas, uno de los aspectos qué más complicaciones tiene asociadas con el adiestramiento de los perros se relaciona con enseñarles a realizar sus necesidades correctamente.
Aquí cabe hablar acerca de algo diferente a un aprendizaje como tal, sino más bien, a la continua repetición de ejercicios, al punto que lleguen a transformarse en hábitos bien asimilados.
Cómo enseñar a un perro a orinar en la casa
En este texto les compartiremos algunas dinámicas que pueden ser de valiosa ayuda para enseñarles a los canes a orinar de manera correcta al estar en casa.
Más allá de la creencia generalizada, los canes son animales bastante aseados. Esto quiere decir que exhiben una preferencia a escoger lugares donde realizar sus necesidades básicas que se encuentren distanciados de los sitios donde reposan o donde consumen sus alimentos.
Conviene tomar esto como un práctico principio para comenzar con el adiestramiento y que nuestro perro aprenda a realizar sus necesidades naturales como es debido estando en el hogar.
Consejos para enseñarle a un perro mascota a orinar en el hogar
Lo que le corresponde a la persona responsable del can es seleccionar un sitio en la casa en donde el animal pueda arrojar sus deyecciones, sin que esto resulte en una situación incómoda tanto para esta mascota como para las personas que lo cuidan.
Generalmente quienes cuidan a un perro mascota prefieren que el animal realice sus necesidades naturales fuera del domicilio.
No obstante, como esto no siempre resulta adecuado para el animal de compañía, puesto que se ve obligado a aguantar las ganas de orinar o defecar hasta que llegue a la casa la persona que lo cuida, o hasta que sea la hora indicada para sacarlo de paseo, con ello puede arriesgarse bastante su salud.
Errores que se cometen al enseñar a un perro a orinar en la casa
Lamentablemente, un adiestramiento inadecuado, en combinación con malos entendidos y con pésimos hábitos en la atención a los perros, deriva en casos de abandono de mascotas o en agresiones físicas para las mismas.
Limpieza extrema, algo básico para enseñarle a un can a orinar
De inicio, algo que se debe realizar antes de que el perro adoptado llegue por primera vez al lugar, es el aseo extremó de la casa, para así eliminar cualquier resto de orina que pudiera haber quedado por la presencia de otro perro.
Con ello se evitará la tendencia a marcar zonas de la casa qué tiene esta clase de animales por naturaleza.
Buenos hábitos para el perro y limpieza en el hogar
Para esta limpieza extrema de la casa hay que utilizar elementos como agua caliente y jabón blanco. no es conveniente usar ninguna clase de productos que incluyan amoniaco o cloro, puesto que los perros suelen sentirse atraídos por los olores de estos productos y suelen orinar en donde los olfatean.
Hay que seleccionar un sitio de sencillo acceso y que se ubique alejado de la zona donde el animal consume sus alimentos regularmente. Las casas con patio resultan ideales al respecto.
Estrategia para que un perro orine en cierta zona de la casa
Un consejo pertinente que les aconsejamos emplear para el adiestramiento del perro, en busca de que orine correctamente estando en casa, es el siguiente: hay que untar en una hoja de papel periódico algunas gotas de la orina del animal y posteriormente dejarla en el sitio que se ha elegido para que el animal realice sus necesidades.
Hay que cubrir la hoja de papel humedecida de orina con otras hojas secas y que se acostumbre a su textura. Eso será muy importante si el perro debe realizar sus necesidades en ambientes interiores.
Es importante reemplazar los periódicos diariamente, ya que a los canes no les gusta orinar o defecar en lugares que se encuentren con suciedad. Es preciso utilizar esta estrategia de los periódicos durante dos semanas por lo menos.
No castigar al perro si orina fuera de su zona permitida
Bajo ninguna circunstancia debemos castigar con golpes o maltratos físicos al can por haber tenido errores durante este adiestramiento. Eso solo provocará que se oculte cuando quiera hacer sus necesidades o que se sienta inhibido cuando quiera aliviar esta necesidad natural en la presencia de alguna persona de la casa.