Las vacas, dependiendo de la zona geográfica donde se encuentren, requieren de cierta clase de nutrición para obtener la cantidad de leche anticipada por el ganadero y la calidad de leche que siempre desean los consumidores. Para conseguir lo anterior, conviene atender recomendaciones como las que les ofreceremos en lo que sigue.
Para obtener una producción lechera de elevada calidad es preciso ofrecerles a los ejemplares una dieta abundante en fibra, energía y proteína, así como también agua fresca en abundancia.
La alimentación de las vacas lecheras
Ciertamente hay alimentos específicos que los ganaderos no pueden dejar de lado, más aún si el ganado se encuentra en su etapa de protección láctea.
Sin embargo, no se debe olvidar que cada granja, finca o criadero es un “universo aparte” y los parámetros que se deben manejar acerca de las raciones alimenticias más convenientes, y los momentos adecuados para ofrecérselas a los animales, deben ajustarse a cada criadero con la asesoría de un veterinario.
Importancia del forraje para la alimentación de las vacas
En principio de cuentas debe de atenderse el material seco. De manera que, lo básico que se tiene atender para la alimentación de las vacas es el forraje. Valdría la pena no escatimar en costos para conseguir forraje económico, tomando en cuenta que tiene la relevancia que tiene el material seco para la nutrición de las vacas lecheras.
Otra fuente de material seco se encontrará en los complementos nutricionales que se comercializan en los mejores comercios especializados. Combinar forraje de buena calidad y un eficaz suplemento nutricional ofrece abundante proteína y energía para los ejemplares vacunos.
Importancia de las sales para la nutrición de las vacas
A continuación, tenemos la sales mineralizadas. Para abordar este elemento prioritario para la nutrición de las vacas lecheras hay que conocer las particularidades del terreno, para así conocer mejor los porcentajes de mineral, calcio o fósforo y conforme a ello ofrecerles a los ejemplares la sal y los minerales que menos se presentan en el forraje que consumen.
Cabe destacar que los ganaderos que consiguen calcular los porcentajes de minerales que sus bovinos en producción láctea requieren obtienen un valioso ahorro en gasto. Y es que, con esa referencia, únicamente invierten en la cantidad de sales que precisan y no tienen que gastar demasiado en un producto que podría estar fuera de sus alcances financieros normales.
Por qué es tan importante el agua para las vacas
No menos importante, para garantizar una buena producción láctea es ofrecerles a los ejemplares el agua suficiente para su correcta hidratación. Es algo que no suelen atender como es debido en las granjas y criaderos. Conviene recordar que una vaca requiere de un consumo diario de 70 litros de agua por lo menos y que la leche incluye un porcentaje de 88 por ciento de agua.
Por lo que se refiere a la cantidad de alimento que requiere una vaca para su consumo hay que considerar algo importante. Las vacas, como sucede con todos los bovinos, toman tres tomas de alimento al día: una en la mañana, otra en la tarde y otra en la noche. No obstante, hay que recordar en todo momento que las rutinas de alimento y las porciones son diferentes de acuerdo con la modalidad de ganadería que se maneje en una explotación pecuaria.
Sistemas de ganadería y alimentación bovina
Como ejemplo de lo anterior tenemos que los ejemplares que se manipulan de acuerdo con sistemas estabulados en todo momento tienen alimento a su alcance. En cambio, en los modelos de pastoreo lo mejor es ofrecerles porciones de suplemento nutricional antes de proceder con la primera ordeña del día.
Posteriormente, a manera de desayuno, hay que permitirles pastar a las vacas y después ofrecerles de nuevo suplemento. Al caer la tarde los ejemplares deben volver a consumir más forraje.
La hidratación de las vacas y la producción lechera
El agua para las vacas no debe faltar nunca en los predios donde permanezcan tales bovinos. Deben hallar el vital líquido en abundancia para que puedan hidratarse cuando lo deseen. Ofrecerles agua a las vacas tras cada periodo de ordeño es básico para que los ejemplares se mantengan saludables.