La calcinosis cutánea es una severa enfermedad que afecta la piel de los perros. Es una problemática que se presenta por ciertas acumulaciones de sales de calcio en la piel que hacen surgir costrosas placas o duros nódulos.
En los perros, tal enfermedad se presenta en ejemplares que exhiben síndrome de cushing o que están sometidos a extensos tratamientos empleando corticoides. Sin embargo, hay otros factores que también pueden originar esta clase de lesiones dérmicas.
Comprendiendo los alcances de la calcinosis cutánea
Hablar acerca de esta enfermedad implica hacerlo sobre un conjunto de lesiones cutáneas que aparecen por anormales acumulaciones de sales de calcio en ciertas zonas de la piel.
De modo específico, los depósitos minerales suelen ser apatita. Tales calcificaciones pueden generarse en la zona de la epidermis, la hipodermis o la dermis.
Por lo general, la calcinosis cutánea se presenta como vinculada a otras patologías o alteraciones.
Lamentablemente la dinámica patológica por la cual aparece la calcinosis cutánea aun no ha sido aclarada por completo.
Variedades de calcinosis cutánea en los canes
En primer lugar tenemos las metastásicas, las cuales se presentan en circunstancias de hipercalcemia, es decir, altos niveles de calcio en el torrente sanguíneo, en los tejidos normales de la piel.
Después destacan las distróficas, las cuales son calcificaciones que se presentan en condiciones de normocalcemia- es decir, normales niveles de la sangre- en los tejidos que han experimentado lesiones considerables.
A continuación tenemos las iatrogénicas, las cuales son calcificaciones que aparecen como resultado de determinadas curaciones y tratamientos con fines terapéuticos.
Finalmente debemos mencionar las idiopáticas, las cuales son calcificaciones en las cuales no se conoce una condición o causa demostrable. Lo anterior implica que su origen no es conocido aún. Tales casos suelen presentarse en canes que aún no cumplen un su primer año.
Cuáles son las principales causas de la calcinosis cutánea
Una vez que hemos comentado acerca de cómo se presenta la enfermedad en cuestión, hay que explicar las causas que propician esta patología.
En este apartado debemos mencionar al Hiperglucorticismo, es decir, el aumento de glucocorticoides en el torrente sanguíneo. Después debemos mencionar a la Enfermedad renal crónica, en tanto que se trata de una complicación que se desencadena con hipercalcemia.
Otras posibles causas que producen la calcinosis cutánea son las infecciones de odio y las lesiones tisulares. Por lo que se refiere a estas últimas, debemos mencionar a las zonas de necrosis, cuerpos extraños, tumores o concentraciones parasitarias.
Del mismo modo, también tenemos que mencionar a las llamadas calcificaciones idiopáticas, las cuales tienen un origen indeterminado.
Principales síntomas de la calcinosis cutánea en los canes
La calcinosis cutánea es una enfermedad que se presenta con los siguientes síntomas: nódulos irregulares o de gran dureza en la piel, o placas costrosas de amarillenta tonalidad.
Las mencionadas lesiones suelen presentarse con pérdida de pelo y una patente alopecia. A veces tales calcificaciones terminan por ulcerarse y acumular materiales calcáreos. En casos así, no es raro que las lesiones se lleguen a infectar y deriven en la llamada pioderma.
Es preciso mencionar que las áreas dañadas con mayor frecuencia en los casos de calcinosis cutánea en el perro son: el área inguinal, la cabeza y el dorso.
Diagnóstico y tratamiento de la calcinosis cutánea canina
Para conseguir el mejor diagnóstico de la calcinosis cutánea es preciso solventar puntos como los siguientes: una completa exploración de lesiones; la realización de una biopsia y un análisis histopatológico.
Sin embargo, aunado al diagnóstico de la lesión, es decir la calcinosis cutánea, resulta clave la identificación de sus causas específicas para así aplicar un tratamiento adecuado.
Para conseguir lo anterior podría ser preciso realizar algunas otras examinaciones como, por ejemplo, análisis de sangre, análisis de orina, pruebas diagnóstico, de imagen y de laboratorio.
El tratamiento para curar la calcinosis cutánea debe de ser determinado por el veterinario según las circunstancias de cada caso. Entre más pronto sean detectados los primeros síntomas, será más viable solucionar este problema de la piel canina.
Por lo que se refiere a las calcinosis cutáneas idiopáticas que no han sido determinadas sus causas, en estos casos no se cuenta con con las condiciones para aplicar un tratamiento determinado, aunque por lo general suelen desaparecer de modo espontáneo en un periodo menor a los doce meses.