Hablar acerca de coriza infecciosa es hacerlo acerca de una problemática de salud que afecta severamente el tracto superior respiratorio. Es el microorganismo denominado como Avibacterium paragallinarum el causante de esta enfermedad que daña bastante a las poblaciones de gallinas y pollos.
La coriza infecciosa aviar se puede identificar en numerosas regiones del mundo y es capaz de producir significativas afectaciones económicas en granjas y criaderos. El principal problema es que la coriza infecciosa es capaz de alterar los niveles de puesta disminuyéndolos considerablemente y también retrasar bastante el normal desarrollo de las aves de engorde.
Comprendiendo los alcances de la coriza infecciosa en las aves de granja
Estamos hablando de una enfermedad que daña a ciertas aves como perdices, codornices, faisanes, gallinas de guinea y los ejemplares de cría más frecuentes de hallar en granjas y criaderos. Cabe mencionar que el microorganismo que causa la coriza es bastante sensible y escasamente resistente al entorno en donde se concentra.
La bacteria Avibacterium paragallinarum se difunde por interacciones directas entre ejemplares aviares tanto por contactos indirectas como también por vía aerogena, así como también a través de las prendas de ropa, alimento y agua.
La coriza infecciosa aviar aparece especialmente en las granjas en donde se concentran ejemplares de edades distintas.
Cuáles son los principales síntomas clínicos de la coriza infecciosa aviar
Es tiempo de comentar acerca de los principales síntomas de la coriza infecciosa. En este sentido, los principales signos de los ejemplares contagiados de coriza son los siguientes: alteraciones en la postura, una patente reducción en la ingesta de agua y de alimento, extraños ruidos traqueales, edemas faciales, ojos inflamados, abundantes estornudos, una depresión extrema, diarrea y exudados mucosos.
Tales síntomas se ven incrementados en su manifestación cuando acontecen infecciones mixtas por la presencia de otros patógenos como es el caso del mycoplasma y la bronquitis infecciosa.
El combate a la coriza infecciosa aviar
Hay algunas estrategias encaminadas al combate de esta enfermedad en los negocios pecuarios. En este sentido, los planes de prevención llevados a cabo por el veterinario incluyen el uso de vacunas en estado inactivo. También es necesario cerciorarnos de que los ejemplares se nutran correctamente. Cómo se ha comentado en los párrafos anteriores, el consumo de H20 y pienso se ve disminuido considerablemente por el contagio de coriza. Ello hace más complicado el suministro de medicamentos para las aves.
Por lo anterior, es aconsejable también la administración de las medicinas por medio de inyecciones y la utilización de suplementos alimenticios. Con lo anterior coadyudaremos a que los ejemplares mejoren su condición, aunque no eliminaremos a la bacteria definitivamente. Los plumíferos serán transmisores del microorganismo causante de la coriza.
No obstante, si se trata a los pollos, gallinas y gallos como es debido y se sigue atentamente un adecuado plan de prevención, no tiene porque volver a presentarse un brote de Avibacterium paragallinarum.
Circunstancias en las que se presentan casos de coriza infecciosa aviar
Las afectaciones derivadas de la pérdidas económicas en los negocios avícolas se presentan a nivel global y tienen mucho que ver con el hacinamiento y el estrés generado en los espacios de crianza. Se trata de factores que aumentan el riesgo de contagio entre las aves.
Como muestra de lo anterior, conviene dimensionar los alcances de la Coriza Infecciosa, enfermedad también producida por la bacteria denominada como Haemophilus gallinarum. Los principales síntomas que definen a esta enfermedad son una hinchazón en las fosas nasales y en los ojos de los pollos y demás aves de corral. Luego aparece una sustancia parecida al queso que puede producirle una pérdida total de la vista a las aves afectadas.
La enfermedad mencionada también provoca que las aves dejen de consumir sus alimentos y que no produzcan huevos como deberían. La Coriza Infecciosa se contagia a través del contacto directo y las motas de polvo que se localizan en el ambiente.
Otra enfermedad bastante severa que afecta a las aves de cría es la Colera Aviar. No solo es bastante contagiosa, sino que, además, deja un gran índice de mortalidad. Es causada por una bacteria denominada como Pasteurella Multocida. Los síntomas principales de la colera aviar son falta de hambre, disminución de peso en los ejemplares, diarrea de color verdoso y amarillo y en algunos casos una intensa parálisis.