La pérdida de un animal de compañía, el fallecimiento de una mascota es una experiencia bastante fuerte en términos emocionales, especialmente para los niños. De la misma manera, esta vivencia se perfila como intensa y dolorosa para quienes gustan de tener mascotas en casa.
En lo que sigue mencionaremos algunos valiosos consejos para superar la pérdida de una mascota.
Cómo tolerar (en la medida de lo posible) el duelo de perder a una mascota
Las mascotas son consideradas por muchas familias como verdaderos integrantes de esos hogares. Con el paso de los años se ha comprendido mejor que los animales de compañía son capaces de tener un enorme afecto por las personas que los cuidan. Además, ciertas mascotas, especialmente los perros, son capaces de exhibir una notable inteligencia muy vinculada a lo emocional.
Lo anterior provoca que, cuando las mascotas dejan de participar en nuestra vida, los periodos de duelo que se deben de experimentar sean extremos, por el gran apego sentimental que se tiene con esos animales.
Y si bien no es comparable esta vivencia con la defunción de un pariente o un cercano amigo, muchos seres humanos tienen un enorme apego emocional por sus mascotas, ya sea porque tienen una estrecha interacción con ellas, o por el cariño que se ha formado hacia ellas con el paso de los años.
Por lo anterior, el fallecimiento de estas mascotas implica un periodo complicado de duelo y tristeza que debe ser afrontado inevitablemente. No obstante, hay ciertas pautas y modos de actuar que podrían hacer algo más tolerable este periodo de duelo por la muerte de nuestra mascota.
Tiempo de duelo y mascotas
El periodo de duelo por la pérdida de un ser querido se presenta de paulatina manera y no puede ser apresurado o forzado en modo alguno. De hecho, no existe un calendario que pueda ser considerado como “habitual” para transitar por el duelo de perder a una persona querida o a una mascota. Si bien algunas personas logran superar esta etapa en algunas semanas, otras tienen que esperar meses o años para conseguirlo.
Cualquiera que sea el caso que nos corresponda, es indispensable ser paciente con uno mismo y así dejar que el proceso se concrete de un modo fluido y natural.
Sentimientos habituales ante la muerte de una mascota
Es normal sentir tristeza, conmoción o nostalgia ante el fallecimiento de un animal de compañía. Mostrar tales sentimientos no es un indicador de debilidad o de tener una desmedida emotividad. Sencillamente expresa que uno se encuentra en periodo de luto por haber perdido a un animal que se quería, por lo cual no se debe sentir vergüenza en modo alguno.
Tratar de pasar por alto el sufrimiento por esa mascota perdida, a la postre solo empeorará las cosas. Para obtener una curación cabal de nuestro interior, es necesario encarar directamente a esa pena y aprender a vivir con ella.
Afrontar de manera activa el duelo por una mascota fallecida
Al manifestar libremente la tristeza que se experimenta por haber perdido a una mascota es muy posible que se requiera de un menor tiempo para superar ese trance que si uno contiene de modo antinatural esas emociones. Una positiva práctica es la de escribir acerca de tales sentimientos, esas emociones de duelo y comentarlas con otras personas que empaticen con nosotros acerca de esa lamentable pérdida.
Consejos para superar positivamente la pérdida de un ser querido
La pena despertada por el fallecimiento de una mascota es algo propio y nadie más tiene derecho de determinar cuándo debemos dejar de llorar, estar tristes o dejar de sentir nostalgia. Es correcto tener tristeza, estar tranquilo o estar serio, pero también reír y buscar instantes de alegría y dejar pasar la pérdida cuando uno se sienta listo.
Otra adecuada práctica relacionada con el asunto que mencionamos es comentar nuestra experiencia con otras personas en redes sociales y portales de internet. Y si nuestros amigos y parientes no comprenden plenamente tu experiencia de duelo, entonces lo mejor es buscar la compañía de personas que sí lo hagan y que entiendan mejor lo que estamos experimentando.
Finalmente, un funeral puede sernos de gran provecho para que podamos manifestar sin trabas nuestra pena por haber perdido a nuestro perro o gato.